Un día después.

Siempre estaba el enigma de qué sería de mi vida si te fueras de mi lado, supuse un vacío inmenso, pensé que me hundiría en la más profunda depresión, imagine que no habría un mañana, o que ya nada tendría el sentido que alguna vez tuvo. De verdad pensé que nada me volvería a llenar, pensé que mirarme al espejo iba a doler cada vez menos. Tenía pesadillas con el día que te marcharas, mirándome hacia atrás por última vez, intentando quedarte pero con una mirada que se iba. Me daba escalofríos tan solo llegar a imaginar el momento en que me mandes un beso aéreo de esos últimos, de esos que sólo se dan los amantes justo antes del fin del mundo, lo hubiera preferido en la boca, esa que nos hacia mentir, pero que se remediaban con un pequeño roce. Que terror llegué a tener en aquellos momentos que estabas ahí, junto a mi, sin pistas de quedarte para siempre, o solo mientras terminaba tu distracción.

Ahora sé que la pérdida no es tan dura como me pareció, no es un infierno como lo creí. Claro esta que tampoco es un baile desenfrenado, ni el más maravilloso paraíso. Pero espere sentirme mucho peor. Y si, mi vida no tiene sentido, pero no porque te fuiste, sino porque no te quisiste quedar. Me llenaré de miradas de desconocidos, tu presencia, tus caricias, tu todo, ya no me llenarán, te lo prometo. No me derrumbaré un centímetro más por alguien que no me aportaba ningún grano de arena. Ni apostaré mi vida a alguien que no apuesta un peso por mi; y lo mejor, no sentiré nada por alguien que seguramente siente mucho, pero no lleva mi nombre tatuado. Te prometo no volver a mirarte, hay que ser inteligente para no reincidir en el vicio, prometo ya no tenerte miedo, porque pasaré a tu lado y el vacío ya no estará. Después de todo, terminaré pretendiendo ser feliz, prometiéndote cosas que no sé si cumpliré, y lo peor de todo, esperando sonreirle a alguien que me hizo llorar.

"Si te vas, procura no despedirte, no quieres ver mi cara de "quédate, sin ti no puedo". Si te vas no me digas nada, no me llames, no me escribas, no me dejes recados, sabré que te fuiste cuando no llegues a la hora pactada en el lugar de siempre. Por favor, si te vas no vuelvas. Si te vas, llevate las cartas que me escribiste, llevate las que te escribí, no me dejes nada, no quiero tener recuerdos de alguien que nunca existió. Si te vas quema las fotos, los regalos, las veces que reímos hasta llorar, quema todo eso, nadie quiere vivir de lo que ya esta muerto. Y por último, si te vas, abrázame, abrázame fuerte, como nunca, no soportaría una vida sin recuerdos sin ese abrazo. Si te vas, la vida sigue, con los ojos cerrados." 

Comentarios

Entradas populares