Thousand stars.

"And honey, we're perfect together; but, let me go". Susurraste en mi oído una premonición que no veía venir, una puñalada que no espere que diera en el blanco. Siempre creías que el amor escrito en inglés siempre era más romántico, incluso un poco de abandono y traición era más profundo si se hablaba en otras lenguas; pero yo quería ser quien te enseñara un amor en español, un amor que no busque frases de canciones para decirse, te iba a enseñar la gramática de un buen beso, la sintaxis perfecta para pasar mis dedos por tu mentón, pero desafortunadamente me diste la más cruel de las lecciones literarias en mi oído.

Esa fue nuestra primera noche juntos, debajo del sonido de las gotas gruesas de lluvia sobre el techo. Fingí estar dormido cuando me dijiste eso, de otra forma te habrías negado a hablar, y fue ahí cuando supe que me dejarías cuando menos me lo esperara, y así fue. Tal vez querías irte para que alguien te buscara, tal vez te perdías a propósito para ver el nivel de idiotez con el que te perseguían, tal vez querías medir mi lealtad, lástima que yo dejo ir a quien me lo pide.

Y te dejé ir Julieta, incluso cuando tomabas mis manos sabía que se estaban resbalando un poco. Primera noche juntos y ya planeabas nuestro final, ya no sé si fue realismo, cobardía o pesimismo, quizá un poco de todas, quizá ninguna, quizá esperabas algo mejor, quizá era tanto que no podías contener en tus manos. Con tantos "tal vez" ya no sé que tanto te conozco, pensaba que mucho, ahora veo que es más fácil encontrar la forma de una bicicleta en la espuma de mi café, que deducir los homicidios de tu pupila.

Dices que ya no hay nada, pero sigues ahí, sin cambiar de casa ni código postal, sigues con mis camisas a cuadros, con mis cartas mal escritas, con mi cabello en tu almohada y con algo de mis recuerdos entre tu garganta y tu córnea. Si te vas olvidate de todo, si bien dicen "el camino correcto es aquel que te arranca las ganas de mirar atrás", y tu me miras cada tanto a través de esa ventana, siempre supe que vivir a dos casas no era la mejor forma de romper con la sensación del nudo en la garganta y el vacío en el estómago. 

Si miras atrás, te devuelves, así que olvidate de mi, olvida las melodías de mi guitarra en tus oídos, olvida mis iniciales en el árbol frente a tu casa, olvidate de mis dibujos rápidos sobre tu sonrisa bajo la cama, olvidate de mi reflejo en el agua, olvida que eres mía, olvida que fuí el único guerrero que jamás te abandonó. Camina hacia adelante "...que si él también te amó, volverá", pero ya esperaste demasiado, hay que aceptar que ya nadie agarrará nuestro hombro para impedirnos el paso.